Un set de discos es una forma de almacenar y recuperar información mediante la grabación de datos en una serie de discos giratorios. Los discos duros son un ejemplo de set de discos. Los discos duros se componen de una o más plataformas giratorias que contienen una o más capas de material magnético que almacenan los datos. Los datos se almacenan en forma de pistas y sectores. Las pistas están dispuestas en círculos concéntricos llamados cilindros. Cada cilindro contiene un número igual de pistas. Los sectores están dispuestos en cada pista. Cada sector contiene una pequeña cantidad de datos. Los datos se leen y escriben mediante un cabezal de lectura/escritura que está montado en un brazo que se mueve sobre la superficie de los discos. Los cabezales de lectura/escritura están situados frente a las pistas en las que se encuentran los datos que se van a leer o escribir. Los cabezales de lectura/escritura están separados por una distancia suficiente para permitir que los brazos se muevan de una pista a otra sin interferencia mutua.
Los discos duros pueden almacenar grandes cantidades de información en un espacio relativamente pequeño. Los discos duros modernos pueden almacenar terabytes de información en un disco giratorio de 3,5 pulgadas. Los discos duros son mucho más rápidos que los discos ópticos y mucho más eficientes en el uso del espacio. Los discos duros también son mucho más confiables que los discos ópticos. Los discos ópticos pueden dañarse fácilmente por la polvo, los arañazos y la suciedad. Los discos duros, por otro lado, están sellados y protegidos contra el polvo y la suciedad. Los discos duros también son mucho más rápidos que los discos ópticos en la lectura y escritura de datos. Los discos duros pueden leer y escribir datos a una velocidad de hasta 6 Gbps.
Los discos duros se han convertido en el estándar de facto para la almacenamiento de datos. La mayoría de los ordenadores y dispositivos móviles utilizan discos duros para almacenar sus datos. Los discos duros son extremadamente confiables y ofrecen un rendimiento y una capacidad de almacenamiento que son insuperables por cualquier otro tipo de dispositivo de almacenamiento. Los discos duros también son muy económicos. Un disco duro de 1 TB puede costar menos de $100. Los discos duros también son muy fáciles de usar. La mayoría de los ordenadores y dispositivos móviles vienen con un controlador de disco duro integrado que permite acceder a los datos almacenados en el disco duro de forma rápida y sencilla.
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